Anoche hablaba con mi almohada en la tranquila soledad de la habitación…
Quería pensar en algo que no fueras tú, evitar el sentirme a tu lado, recordar el corto tiempo que te conocí...
Imaginaba y sentía la emoción del día que te encontrara de frente, escuchar de tus labios todo lo que tus dedos habían escrito para mí, pensaba en tu reacción y siempre se me pasaban muchos posibles sucesos, no podía evitar estar nerviosa cuando llegare el día, planeaba un día perfecto para pasarlo contigo…
Paso tiempo, horas, días pensándote y me alegra la vida dedicártelos...
Decía dentro de mi “ eres una ilusa acaso?” tanto tiempo que le dedicas en el día y encima también en la noche… que paso con tu decir de: Mi corazón está apagado, no hay amor para nadie- que paso con aquella mujer implacable que no quería nada?
Ahora después de un año, he decidido dejar de pensarte…me escribo con amigos… con amigas… pero siempre tu presente.
Anhelaba tenerte, relajados los dos, riéndonos al recordar cosas vividas por medio de la escritura… meneo mi cabeza de lado a lado…
Escucho música salsa… me recuerda a ti, baladas… me convierto en una romanticona. ¿QUE ME HICISTE?!!!!
Te posesionaste de mi cerebro como una corriente que pasa de neurona en neurona diciendo “hoola yo, aquí”.
Tomo mi lápiz para escribir, plasmar letras en una hoja que no tenga que ver contigo algo que no te recuerde… ¡Vaya! No se me ocurre nada… un hecho irrefutable de querer negarme a ti… es negar un aparte de mi vida… un pedazo importante…
Cierro esta página, una más de mi libro titulado VIDA, pero de las pocas llamadas amorosas
Sonicha
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