Todo tiene caducidad, absolutamente todo.
Aquellas promesas de amor, quien dice amarte para siempre, que aunque seas de malgenio, pobre o romántico, en algún momento mirará otros paisajes y quedará prendado. Por consiguiente te dejará y así vuelva no será lo mismo.
Tus hijos no son eternos a tu lado, ellos formarán su propio hogar, amarán a esa persona que le dediquen su tiempo y espacio, por eso serán parte de otro mundo y se irán.
Tus amigos, dentro de los cuales encontrarás unos distante y otros muy importantes para ti, e igualmente habrá una persona que será muy especial, aquella con quien puedes contar tus pequeños detalles, que los guardará, aquella amistad que te aconseja, te escucha, te atiende, pero si te alejas un poco para no hostigarle tanto hallará a alguien que se convertirá en su gran amigo o amiga y se olvidará de ti, tan solo te queda mirarle desde lejos y así duela dejar sea feliz con su nueva vida.
la vida, aquella que tienes y a veces valoras mucho, aquella que te da todo sin pedir nada a cambio,
la vida en donde no sabes si seguir poniendo tu sangre en la tierra, viviendo días de poco sol y mucha tiniebla, caminar pensando y sentirse muerto en vida o vivo en medio de tantos muertos. Esta también tiene caducidad.
Por ello, TODO absolutamente TODO tiene caducidad en este mundo. Sonicha(d.r.a)
