Enero 16 del 2021
El dia de ayer fui nuevamente con el oncòlogo, ya él había visto los exámenes y solicitado citas con los especialistas. Apenas llegué hizo los procedimientos de revisarme y preguntar como estoy o como me siento.
-Bueno sigue mejorando el pecho, eso me alegra y ya solo te falta una quimio, ahora vamos a lo que vamos.
- He visto tus exámenes, y pues no te podré decir que serán excelentes noticias, pero sabiendo como eres de fuerte tal vez lo tomarás con calma y seguirás. ¿ Algo que preguntar?
- prosiga doctor.
- Ecocardiograma, marca unos latidos muy lentos y demasiado suaves, sin embargo no presenta ninguna arteria taponada, tan solo la bradicardia .
- Gammagrafìa, presenta algunos huesos afectados, posiblemente por las quimioterapias o la edad, eso el ortopedista te lo dirá, aparte de ello en la columna presentas un quiste o tumor por lo cual solicité cita con el ortopedista. Por ello tu dolor de espalda, fuera de que tienes 4 discos afectados.
-Resonancia, tu bien sabes que yo soy oncólogo y en cuanto a esto hay especialista. ¿ De veras nadie vino contigo? ¿ O no quieres que nadie sepa nada?
- Vine sola doctor, como siempre. siga que le escucho atentamente ( sentía que se me desgarraba todo, pero llorar no vale de nada)
- Bueno te mando al neurólogo, por que se presenta un quite en el cerebro cerca a la órbita de tu ojo derecho. De allí puede ser ese dolor de cabeza que se presenta.
Yo lo miraba y mordía mi labio inferior es una costumbre que tengo cuando no quiero hablar.
- El TAC muestra lo de la columna igualmente, pero además tienes un foco en el pulmón derecho, ya deben hacerte otros exámenes.
- Si doctor tengo cita con el neumólogo.
- Ahora en cuanto a la pregunta que me hiciste, solo te puedo decir que depende de los tratamientos y de tus ganas de seguir adelante, eres una mujer muy fuerte, joven y bonita con todo respeto te lo digo. Si quieres te doy cita con el psicòlogo.
- No doctor, no lo necesito, gracias.
- Pide cita nuevamente conmigo en 4 semanas. Cuídate mucho.
-Gracias doctor.
Me despedí agradeciéndole por que mi otro oncólogo ni me escuchaba, de veras en este momento no sabía que hacer, fui a la cafetería de la clínica, pedí un café y me senté a pensar.
¿ Que hago Dios? Esto es una vida de mierda. Sigo o me doy por vencida.
No sabía que hacer como proceder. Me levanté y fui al parqueadero por la moto, me sentía mareada, en pocas palabras; DESAHUCIADA, triste, sin fuerzas.
Sentada en la moto, pensaba muchas cosas, malas se pasaban por mi mente. demasiado malas. Cuando iba saliendo sonó mi móvil, respondí y era mi niño que me preguntaba por que no llegaba. Le dije que ya iba para la casa, que me esperara y que lo amaba mucho.